Una depresión es un trastorno del estado de ánimo, en el que la persona experimenta fundamentalmente, un estado de permanente tristeza y ánimo negativo. Quien la sufre lidia con una gran desmotivación, apatía, baja autoestima, y experimenta una reducción del nivel de actividad general o una pérdida de interés por actividades placenteras. Esto conlleva un aislamiento social y familiar.
Se presentan pensamientos muy negativos sobre la visión que tiene la persona sobre sí misma, los que le rodean y el mundo en general. Es habitual que sienta que no hay esperanza, que nada cambiará o que no hay salida, ni nada positivo en su vida que merezca la pena.
Los síntomas de la Depresión Mayor más comunes son los siguientes:
Cuando estos síntomas son más leves, pero más prolongados en el tiempo, Por lo menos dos años, hablamos de otro frecuente trastorno del estado de ánimo llamado Distimia.
Es importante señalar que, si sospechas que un familiar tuyo o conocido está sufriendo este problema, los intentos por sugerirle que se “anime o haga un esfuerzo por salir”, son contraproducentes porque pueden llevar a la persona con depresión a sentirse incomprendida y muy presionada por esas demandas. Es necesario que tengamos en cuenta que se trata de una enfermedad que anula la voluntad y limita mucho la capacidad real de la persona. A veces, es recomendable que los familiares acudan a algunas sesiones de terapia para recibir orientación, acompañamiento de su propio dolor y herramientas que les ayuden a gestionar la relación con la persona que padece depresión.